Por Mario Niño, DMin.
Esta plataforma analiza la Unidad en la Iglesia, no como un ideal anhelado, sino como una realidad a la cual se enfrenta la iglesia a nivel mundial. No habrá unidad en el cristianismo ni en la iglesia, mientras el énfasis en vez de ser teocéntrico, (donde Dios es lo más importante), sea, eclesiocéntrico (donde la ekklesía es lo más importante), o antropocéntrico (donde el ser humano es lo más importante). En el marco de esta realidad, debemos analizar tres tópicos que presenta la lección # 9.
1. Unidad en la Diversidad: Esto puede ser o no posible, dependiendo de los asuntos que se estén considerando. Por ejemplo en el judaísmo había una corriente liberal (los Saduceos Helenistas) que afirmaban que no era cierto que había resurrección y que era aceptable la mezcla de la religión y la cultura hebrea con la religión y la cultura griega; esto contrastaba con la posición conservadora de los fariseos que creían en la resurrección y que no aceptaban la mezcla con la cultura y la religión griega. Son dos posiciones completamente opuestas. ¿Estas dos posiciones son aceptables dentro del concepto de Unidad en la Diversidad? De ninguna manera. Esto lo que demuestra es una profunda división en conceptos y creencias acerca de Dios, de su Palabra, y de las indicaciones dadas por Dios a su pueblo.La unidad dentro de la diversidad es la diversidad en dones y talentos Evang. pgs 98-103.
Las corrientes de pensamiento liberal, conservador, ortodoxo o radical, no solamente existen en la religión; también existen en las iglesias o denominaciones cristianas. ¿Me pregunto si el alinearse con un grupo de pensamiento liberal, conservador, ortodoxo o radical, es aceptable bajo el concepto de ‘Unidad dentro de la Diversidad’? En la vida real es muy difícil lograr un acuerdo o entendimiento de los que están en el ala liberal con los que están al otro extremo en el ala ortodoxa y muchas de estas discrepancias se generan en el campo de la interpretación bíblica.
2. La Unidad Práctica: El apóstol Pablo al escribir a los Colosenses en el año 62 e.c. (e.c. significa era común), les aconseja: “Despojaos del viejo hombre…y revestidos del nuevo hombre…que se va renovando hasta el conocimiento pleno. Col. 3:9,10. Despojarse del viejo hombre no es cuestión de aplicarle fuerza de voluntad o meditación oriental. Despojarse del viejo hombre es algo que solo lo puede hacer el Espíritu Santo. Pablo nos está diciendo que intentemos despojarnos del viejo hombre, y encontraremos que no es posible lograrlo aplicando las ‘técnicas humanas’. La única manera de lograr un cambio o transformación en el ser humano es con la ayuda y el poder del Espíritu Santo. Algo más que es necesario tomar en cuenta: Dios tampoco envía su Espíritu con solo pedirlo, “Porque Jehová no mira lo que mira el hombre…pues Jehová mira el corazón.” 1-Sam. 16:7. Dios observa el estado de la mente o corazón, y eso demostrará si la relación y la petición son genuinos.
3. La Unidad en la Misión. Para mantener la Unidad en la Misión, necesitamos tener claridad en cuanto a la verdadera misión. Cuando el Señor indicó a la iglesia cristiana través de Marcos en el año 55 e .c. “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” (Mar. 16:15), utilizó la palabra gr kerussoque significa predicar, proclamar, publicar. Por quince (15) años la iglesia estuvo predicando y proclamando las buenas nuevas, porque consideraba que esa era su misión. ¿Estaban haciendo lo correcto? En el año 70 e.c. -y antes de la destrucción del Templo de Jerusalén, Dios reveló por medio del evangelio de Mateo lo que se conoce como la gran comisión: “Por tanto id y haced discípulos a todas las naciones…” (Mat. 28:19). Aquí no se usó el término gr kerusso, que figura en el Evangelio de Marcos, sino el vocablo matheteuo que significa instruir, enseñar, hacer discípulos.
¿Es verdad que la iglesia apostólica del primer siglo estuvo practicando incorrectamente la misión? ¿Es verdad que con este ‘descubrimiento’ semántico (semántico se refiere al estudio del significado de las palabras), la verdadera misión es discipular? Tengo la impresión que estos términos no se oponen entre sí, sino que el uno es complemento del otro. Por quince años la iglesia estuvo predicando (gr kerusso) y posiblemente no se dió la importancia requerida a las instrucciones que Dios había dado a Moisés acerca de cómo vivir en comunidad (heb torah). Es posible concluir que la instrucción dada a través del evangelio de Mateo nos esté diciendo que es correcto predicar y proclamar las buenas nuevas, pero que se deben incluir los principios, valores e instrucciones (léase leyes, mandamientos, decretos, estatutos, ordenanzas) que el Señor impartió por medio de Moisés.
Recordemos que en el Monte Sinaí Dios le dio al pueblo lo que hoy lllamaríamos la declaración de misión o declaración de propósito cuando dijo: “Yo soy Jehová, que os hago subir de la tierra de Egipto para ser vuestro Dios: seréis, pues, santos, porque yo soy santo.” Lev. 11:45. Aquí se definen cuatro elementos básicos: # 1. Permitir la supremacía de Dios. # 2. Recorrer el camino de la santidad. Estas dos premisas generarían la # 3. Una transformación en la vida de los hijos de Israel, que se convertiría automáticamente en un testimonio ante las naciones y facilitaría la # 4. Los israelitas tendrían la oportunidad de aclarar, enseñar y predicar acerca del Dios de Israel. Así tenemos dos elementos expresados en el texto y dos elementos tácitos. ¿Es entonces la misión del cristianismo solo predicar?
La pregunta de investigación que aclararía esta discrepancia de opiniones sería la siguiente: ¿Anuló Dios la misión original dada a Israel cuando transfirió el reino de Dios al cristianismo? La lógica nos indica que el no cumplir la misión original que incluía la supremacía de Dios, fue lo que impidió que el judaísmo produjera los frutos esperados, y por no producir esos frutos, el reino de Dios se transfirió al cristianismo Mat. 21:43. En mi opinion, la misión original sí se transfirió al cristianismo y el predicar o discipular unicamente como se está promoviendo hoy en el cristianismo, no está cumpliendo la misión original de Dios dada al pueblo de Israel. Si la misión original es la legítima, entonces la agenda de la iglesia y de sus dirigentes tendría que reorganizarse y las prioridades cambiarían.
La prueba más convincente de la unidad -como afirma el Dr. Fortín es el amor, el respeto y la consideración que se generan en el trato entre unos con otros como hermanos en Cristo, y entre dirigentes y dirigidos como parte de la misma iglesia. Cuando el trato es rudo, desconsiderado e injusto, lo que demuestra es la ausencia de Dios en la vida de los seres humanos. Aunque la sicología y la sociología son buenas, desafortunadamente la unidad no se logra con aportarle sociología, o sicología, o cualquiera otra disciplina académica, pues la unidad es un resultado que se produce automáticamente cuando la Causa o Fuente (que es Dios), está presente.
Basados en la Biblia dentro del contexto del gran conflicto entre el bien y el mal, envíenos su opinión sobre la pregunta de investigación: ¿Anuló Dios la misión original dada a Israel cuando transfirió el reino de Dios al cristianismo? Si incluye un soporte bíblico, su concepto tendrá mucho más peso.
______________________________________________________________
¿Le ha sido útil este artículo? Al enviar sus comentarios, igualmente nos indica que usted recibió este material. Puede escribir a: nino@andrews.edu